Este parece ser el caso de una figura querida por muchos en México.
En febrero de 2023, Andrea Legarreta y Erik Rubín anunciaron su separación, una noticia que conmovió a sus seguidores. A casi dos años del anuncio, la conductora de “Hoy” ha compartido públicamente cómo ha redefinido su vida tras esta experiencia. "Mis compañeros dicen que este es mi año, pero sinceramente no me urge. Estoy tranquila," reveló en una reciente entrevista.
Si bien la separación no ha sido sencilla, Andrea mantiene una perspectiva positiva. La prioridad indiscutible son sus hijas, Mía y Nina Rubín. Para garantizar su bienestar, Andrea y Erik trabajan en mantener una relación cordial, a pesar de que el divorcio formal aún no se ha concretado. “Compartimos mucha vida juntos, y creo que las rupturas no tienen por qué ser tóxicas. Es importante ofrecer a los hijos un ambiente de respeto y armonía,” comentó.
Lejos de la prisa, Andrea se enfoca en su estabilidad emocional. El proceso legal del divorcio, según sus propias palabras, podría formalizarse en 2025. Por ahora, la conductora prioriza su bienestar y el de sus hijas. No descarta la posibilidad de enamorarse nuevamente, pero lo hace con cautela y claridad sobre lo que busca: una relación basada en el respeto, la comunicación abierta y, sobre todo, libre de toxicidad. “Nosotros fuimos una muy buena pareja. Si alguna vez tengo otra historia, que sea muy bonita. No quiero celos ni toxicidad,” afirmó con firmeza.
La evolución de su relación con Erik Rubín es un ejemplo de cómo una separación puede transitar hacia una nueva dinámica, basada en el respeto mutuo y el bienestar familiar. Una amistad sólida que, aunque transformada, perdura en el tiempo.