Aunque la gala brilló con reconocimientos a artistas consagrados y nuevas promesas, dos nombres resonaron con fuerza en las conversaciones posteriores: Taylor Swift y Billie Eilish. Ambas figuras, pilares indiscutibles de la industria, regresaron a casa con las manos vacías a pesar de contar con un número considerable de nominaciones.
Swift, con seis nominaciones a cuestas, incluyendo la codiciada categoría de "Álbum del Año", vio como su trabajo se quedaba sin galardón. El triunfo en esta categoría fue para Beyoncé con "Cowboy Carter", un álbum que, sin duda, también ha cosechado un gran éxito.
Mientras tanto, el álbum "The Tortured Poets Department" de Swift, a pesar de ser uno de los más exitosos del año pasado, no obtuvo ningún premio. Algunos analistas sugieren que la Academia de Grabación priorizó el reconocimiento a artistas emergentes como Sabrina Carpenter y Chappell Roan.
Por su parte, Billie Eilish, con siete nominaciones, entre ellas tres de las categorías más importantes, sufrió una derrota aún más contundente. La canción "Birds of a Feather", un éxito rotundo tanto comercial como de crítica, no logró obtener ningún Grammy. La reacción de sus fans en redes sociales fue inmediata y abrumadora, reflejando la sorpresa y la decepción por este resultado.
La ausencia de premios para estas dos gigantes de la música generó un debate en la industria, dejando abierta la cuestión sobre los criterios de evaluación y la evolución de los gustos del público. La noche de los Grammy 2024 quedará grabada en la memoria de muchos, no solo por las victorias, sino también por las notables ausencias.