Simon Cowell: De Gru a Golden Buzzer, un fin de semana de locura

De él descendió una figura reconocible al instante, aunque con un estilo informal que contrastaba con su habitual imagen pública.
Hablamos, por supuesto, de Simon Cowell. A sus 65 años, el magnate de la música lucía una camiseta gris oscura de cuello redondo, pantalones azul marino y unas modernas gafas de aviador negras. Unas zapatillas negras y un bolso de mano marrón completaban su look casual, que reflejaba un estado de ánimo jovial. Su sonrisa ante las cámaras lo decía todo: estaba listo para otra jornada de audiciones.
Pero la historia no termina ahí. Esta aparición en America's Got Talent llega tras un fin de semana de emociones encontradas en Britain's Got Talent. Resulta que Cowell se ha convertido en Gru, el villano de Mi Villano Favorito, gracias a un grupo de bailarines disfrazados de Minions. La escena, que se emitirá el sábado, promete caos y risas. Los Minions, con sus característicos movimientos, transformaron a Cowell en una versión hilarante de Gru, con cabeza rapada y nariz puntiaguda.
Sin embargo, este evento cómico sucede después de una decisión controvertida en Britain's Got Talent. Cowell, conmovido por la actuación de la banda Electric Umbrella, compuesta por jóvenes con discapacidades del aprendizaje, rompió las reglas del programa al otorgar un segundo Golden Buzzer. Cada juez solo tiene uno por temporada, pero la energía y la emoción de la banda conmovieron al jurado y al público, que estalló en aplausos y confeti dorado. Las reacciones en redes sociales, como X (antes Twitter), fueron de conmoción y admiración: “¡Llorando, los amo tanto!”, “¡Eso se mereció totalmente un Golden Buzzer!”, se leía en numerosos mensajes.
Este acontecimiento contrasta con la controversia generada por la actuación de Oliver, un guitarrista de 11 años que, aunque recibió un Golden Buzzer de Amanda Holden, generó debate entre los televidentes. Algunos señalaron problemas de audio durante su presentación, cuestionando si la música de fondo opacaba su talento. Comentarios como “No se podía ni escuchar la guitarra”, o “La música de fondo era demasiado alta”, inundaron las redes sociales. Mientras tanto, otros elogiaban la destreza del joven guitarrista y la justicia del premio.
En resumen, Simon Cowell se encuentra inmerso en un torbellino de emociones y controversias, desde su look informal hasta las decisiones que causan furor en las redes sociales y el entretenido episodio de los Minions en Britain's Got Talent. Los acontecimientos recientes muestran la complejidad del mundo del espectáculo y la reacción intensa del público a cada decisión tomada por los jueces.