Kiev, Ucrania
La aeronave de origen ucraniana transportaba a al menos 40 militares y nueve tripulantes.
Al menos 54 soldados ucranianos murieron a manos de los rebeldes prorusos, 49 de ellos tras ser derribado un avión militar, en la jornada más negra para las fuerzas gubernamentales desde el inicio hace dos meses de la operación antiterrorista en el sureste del país.
El avión Il-76, que además de sus nueve tripulantes llevaba a 40 militares de elite de la 25ª Brigada Aerotransportada de Dnepropetrovsk, iba a tomar tierra en el aeropuerto de Lugansk cuando fue derribado presumiblemente por al menos dos proyectiles de los insurgentes, que reconocieron la acción.
Otros cinco soldados de la Guardia Fronteriza ucraniana murieron hoy en la ciudad de Mariupol, en el sur de la vecina región de Donetsk, después de que la columna de vehículos militares en la que circulaban fuera alcanzada por fuego de mortero de los rebeldes.
El Servicio de Guardafronteras de Ucrania, muy cuestionado por la opinión pública de su país por dejar en manos de los prorrusos cientos de kilómetros de la frontera ruso-ucraniana, reconoció las bajas que sufrieron sus hombres en la ciudad a orillas del mar de Azov, escenario ayer de escaramuzas entre los dos bandos enfrentados.
Por su parte, las fuerzas ucranianas han matado a más de 250 insurgentes prorrusos en las últimas 24 horas, muchos de ellos ciudadanos rusos, informó hoy el ministro de Defensa ucraniano, Mijail Koval, al presidente del país, Petro Poroshenko.
El titular de Defensa ofreció estas cifras durante la sesión urgente del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania convocado por el presidente tras la muerte esta madrugada de 49 soldados ucranianos al ser derribado un avión militar de transporte cuando iba a aterrizar en el aeropuerto de Lugansk.
Gobierno promete reacción
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, declaró hoy luto nacional para mañana y prometió “una respuesta adecuada a los terroristas” por derribar el avión militar ucraniano.
Todos los implicados en un cínico acto terrorista de esta envergadura serán castigados con toda seguridad. Ucrania necesita la paz, pero los terroristas tendrán una respuesta adecuada”, dijo el presidente ucraniano.
La región de Dnepropetrovsk, donde tiene su base permanente la 25ª Brigada Aerotransportada, declaró luto para mañana y el próximo lunes.
La mayoría de los militares fallecidos en el ataque de los rebeldes, 32 de los 49, procedían de esa región industrial del este rusoparlante de Ucrania.
Varios expertos en defensa e incluso un oficial de la Guardia Nacional de Ucrania, el comandante del batallón ‘Donbass’ Semion Semenchenko, cargaron con dureza contra los mandos de las Fuerzas Armadas ucranianas por permitir que el avión aterrizara en una zona rodeada por milicianos armados.
La responsabilidad por la muerte de los 49 soldados, además de los ejecutores, recae en los responsables de las Fuerzas Armadas. ¿Dónde estaba nuestra inteligencia militar, si es que la tenemos?”, lamentó Semenchenko en su página de Facebook.
Aunque el propio aeropuerto de Lugansk está bajo el control de la Guardia Nacional, sus alrededores están en manos del Ejercito del Sureste, brazo armado de la autoproclamada república popular de Lugansk, que se ha declarado independiente de Ucrania.
Unos 200 manifestantes enfurecidos se concentraron a las puertas de la Embajada rusa en Kiev para exigir “el fin de la injerencia de Rusia en los asuntos internos de Ucrania”, como rezan algunos de los carteles exhibidos por los congregados.
Los más agresivos tiraron huevos y líquidos contra la Embajada y los coches del cuerpo diplomático ruso aparcados frente al edificio, a algunos de los cuales pincharon las ruedas..