Washington, EU.
Preguntarán a los residentes ilegales si cumplen con los requisitos para entrar en el plan migratorio.
El gobierno de Barack Obama está ordenando a agentes de inmigración que pregunten a quienes encuentren residiendo en el país de forma ilegal si podrían entrar en los parámetros de la nueva ley del presidente para evitar su deportación, según material de formación interno.
Los funcionarios tienen también la orden de revisar documentos gubernamentales para identificar a cualquier inmigrante encarcelado que podría quedar en libertad con la entrada en vigor del programa.
Las directivas del Departamento de Seguridad Nacional suponen un inusual cambio en las leyes migratorias estadounidenses, obligando al gobierno a identificar a los inmigrantes que podrían aspirar a los beneficios de la propuesta presidencial. Antes correspondía a los inmigrantes o sus abogados demostrar que cumplían los requisitos necesarios para evitar la cárcel y quedarse en el país.
Es como la agencia tributaria llamase a los contribuyentes para recomendarles la utilización de ciertas exenciones o deducciones.
El material de formación estaba dirigido a agentes del departamento de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y de la agencia de Inmigración y Aduanas (ICE). Instruye a los agentes para que “comiencen inmediatamente a identificar a personas bajo su custodia, así como a otros que encuentren por primera vez” que pudiesen ser candidatos a evitar la deportación.