$250,000 Otorgados en Caso de Discriminación en el Departamento de Bomberos de Nashville
En un veredicto que ha sacudido los cimientos del Departamento de Bomberos de Nashville, un jurado otorgó $250,000 en daños a una empleada de larga data tras una demanda por discriminación.
Maggie Lawrence presentó una demanda contra el Gobierno Metropolitano de Nashville a través del departamento de bomberos, alegando que fue discriminada bajo la Ley de Derechos Civiles de 1964 y la Ley de Discriminación por Edad de 1967.
Según la demanda, Lawrence fue contratada por el NFD en 1992 como inspectora de incendios. Durante sus más de treinta años de empleo en el departamento de bomberos, Lawrence desempeñó múltiples roles, que incluyeron investigadora de incendios, Subcomandante de Bomberos y Subcomandante de Bomberos Adjunta.
Sin embargo, a pesar de su vasta experiencia y su preparación para convertirse en la primera mujer Comandante de Bomberos del NFD, Lawrence se encontró enfrentando un muro de discriminación. Se alega que el jefe del departamento, Willian Swann, tomó medidas drásticas para mantener el "club de los viejos amigos" en su lugar.
Según documentos judiciales, Swann reasignó a un empleado masculino más joven y menos experimentado de otro departamento a la oficina del comandante de bomberos e instruyó a Lawrence y a su jefe a capacitarlo para asumir el cargo.
Cuando su jefe, el Comandante de Bomberos Al Thomas, sugirió que ella era una candidata más calificada, fue despedido, y como resultado, Lawrence fue pasada por alto para la promoción.
El jurado, en su veredicto, reconoció la injusticia sufrida por Lawrence y le otorgó $250,000 en daños. Sin embargo, este fallo no puede reparar completamente el daño causado por la discriminación y el favoritismo en el lugar de trabajo.
En respuesta a la demanda, el Departamento de Bomberos de Nashville expresó su desacuerdo con la decisión del jurado, pero aseguró respetar el proceso judicial. No obstante, reafirmaron su compromiso con la promoción del personal más calificado para garantizar la seguridad de la comunidad.
Mientras tanto, el alcalde Freddie O'Connell está al tanto de la decisión judicial y ha solicitado al Departamento Legal de la Ciudad una actualización y recomendación sobre los próximos pasos a seguir. Sin embargo, este veredicto deja en claro que aún queda trabajo por hacer en la lucha contra la discriminación en el lugar de trabajo.