El hombre se topó con los sospechosos alrededor de las 3:25 a.m. cerca de la intersección de Pico Boulevard y Hope Street, según el oficial Jader Chaves, portavoz del Departamento de Policía de Los Ángeles. Uno de ellos le disparó antes de que los tres huyeran en un vehículo, agregó Chaves.
La víctima, de entre 30 y 35 años aproximadamente, fue trasladada a un hospital local y declarada fallecida.
El convertidor catalítico, un dispositivo de control de emisiones de escape que se encuentra típicamente en el chasis de un vehículo, contiene metales preciosos como rodio, paladio y platino. Los ladrones pueden obtener cientos de dólares vendiéndolos a proveedores de repuestos de automóviles o desguaces, donde pueden fundirse y extraer los metales altamente valiosos.
Los robos de convertidores catalíticos se dispararon en California durante la pandemia de COVID-19, fenómeno atribuido en parte al aumento de la angustia económica. Esta tendencia impulsó nuevas leyes estatales que prohíben a los recicladores comprar la pieza a cualquier persona que no sea el propietario legal o un distribuidor autorizado, y aumentan las sanciones para los compradores que no certifiquen que un convertidor catalítico no fue robado.