La tranquilidad de la ciudad se ha visto empañada por la sombra de una organización criminal que ha puesto su mirada en los jóvenes: el Tren de Aragua (TdA). La presencia de esta pandilla venezolana, con más de 5,000 miembros, se extiende por América Latina y Norteamérica, llevando a cabo actividades ilícitas como tráfico de personas y drogas.
En las últimas semanas, la comunidad de Houston se ha visto sacudida por la noticia del arresto de Jorgenys Robertson Cova, un hombre de origen venezolano de 32 años, acusado de intentar reclutar jóvenes de la Jane Long Academy y Las Américas. Cova, quien llegó a Estados Unidos hace dos años, es sospechoso de ser un miembro activo del TdA.
Este incidente ha generado preocupación en la comunidad, especialmente entre los padres de familia, quienes temen por la seguridad de sus hijos. La creciente actividad del Tren de Aragua en Houston ha encendido las alarmas, creando un ambiente de incertidumbre y temor.
Las autoridades locales no se han quedado de brazos cruzados. El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha ofrecido una recompensa de $5,000 a quienes brinden información que conduzca a la captura de miembros del TdA en el estado. Esta medida busca frenar el avance de la pandilla y proteger a los jóvenes del peligro del reclutamiento.
Para contrarrestar esta amenaza, se están implementando programas de prevención en las escuelas de Houston. Profesores y padres son instados a estar atentos a cualquier cambio en el comportamiento de los menores, creando un ambiente seguro donde los jóvenes puedan hablar de cualquier presión externa que estén experimentando.
Campañas educativas y de concienciación sobre los riesgos del reclutamiento son cruciales para mantener la seguridad en los centros escolares y evitar que pandillas como el Tren de Aragua influencien a la juventud de Texas.
La colaboración entre la comunidad y las autoridades es esencial para enfrentar esta problemática y proteger el futuro de los estudiantes.