Una compañía farmacéutica emitió un retiro este mes de miles de frascos de duloxetina, un medicamento que a menudo se receta para tratar la depresión. Según la FDA, se retiraron del mercado más de 7100 frascos de cápsulas de liberación retardada de duloxetina debido a la elevada presencia de nitrosaminas, un ingrediente que se cree que es cancerígeno. Las nitrosaminas ya están presentes “en niveles bajos en el agua y los alimentos”, explica la agencia, pero también pueden formarse durante las reacciones químicas durante el proceso de fabricación del fármaco.
“Algunas nitrosaminas pueden aumentar el riesgo de cáncer si las personas se exponen a ellas por encima de los niveles aceptables y durante largos períodos de tiempo”, explica la FDA. “No se espera que las personas que toman medicamentos que contienen NDMA en cantidades iguales o inferiores a los límites de ingesta aceptables todos los días durante 70 años tengan un mayor riesgo de cáncer”.
La agencia etiquetó el retiro como Clase II, lo que significa que el producto tiene una baja probabilidad de causar lesiones importantes o la muerte. Las cápsulas de duloxetina retiradas del mercado fueron fabricadas por Towa Pharmaceutical Europe y distribuidas a nivel nacional por Breckenridge Pharmaceutical, Inc., de Connecticut, según un aviso de retirada. Se recetaron en cápsulas de liberación retardada de 20 mg, en frascos de 500 unidades.
Según la Clínica Mayo, la duloxetina también puede conocerse por otras marcas, como Cymbalta, Drizalma Sprinkle e Irenka. La duloxetina puede recetarse como antidepresivo, pero también para tratar la ansiedad o el “dolor causado por el daño nervioso asociado con la diabetes”, según la organización.