La multinacional ha tomado la difícil decisión de despedir a más de 400 empleados de la Sociedad de Empleados Profesionales de Ingeniería en la Industria Aeroespacial (SPEEA). Según un informe de The Seattle Times, estos despidos se centran principalmente en ingenieros, científicos, analistas y técnicos. De los trabajadores afectados, 218 pertenecen a la unidad profesional del SPEEA, mientras que el resto forma parte de la unidad técnica.
El director ejecutivo, Kelly Ortberg, ha comunicado a su equipo que es imperativo “reiniciar los niveles de plantilla” para adaptarse a la nueva realidad económica que enfrenta la compañía. A pesar de que los maquinistas sindicalizados han regresado a sus labores tras una huelga de ocho semanas, Ortberg ha señalado que esta situación no es la causa principal de los despidos, sino una respuesta a un exceso de personal acumulado.
Los empleados que han sido despedidos recibirán servicios de transición profesional y beneficios médicos subsidiados durante tres meses, además de indemnizaciones basadas en su tiempo de servicio. Este proceso de reestructuración se produce en un momento crítico para 'Boeing', que ha enfrentado múltiples dificultades desde un incidente con un avión de Alaska Airlines en enero. Las tasas de producción han disminuido y la Administración Federal de Aviación (FAA) ha impuesto restricciones sobre la producción del modelo 737 MAX, limitándola a solo 38 aviones mensuales, un objetivo que la empresa aún no ha logrado alcanzar.