En el distrito de Dima Hasao, Assam, al menos nueve mineros permanecen atrapados desde la noche del lunes. No se trata de una mina convencional, sino de una peligrosa "mina de ratonera" o "madriguera", un método de extracción prohibido en India desde 2014 por el Tribunal Verde Nacional. Este tipo de minería, calificada como "peligrosa para la vida y poco científica", se caracteriza por sus estrechos túneles y la vulnerabilidad a inundaciones.
El jefe de Gobierno de Assam, Himanta Biswa Sarma, confirmó el incidente a través de sus redes sociales, anunciando la movilización de recursos para el rescate. "Hemos solicitado la asistencia del Ejército. La Fuerza Estatal de Respuesta a Desastres (SDRF) y la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF) también están colaborando," escribió Sarma, añadiendo posteriormente una lista con los nombres y edades de los mineros atrapados, cuyas edades oscilan entre los 26 y los 57 años.
Estas minas ilegales atraen a trabajadores, en su mayoría migrantes pobres con pocas alternativas, quienes se arriesgan a las condiciones extremas en busca de sustento. La precariedad de estos trabajos y la falta de regulaciones efectivas han llevado a tragedias similares en el pasado. Como ejemplo, en 2019, al menos 15 trabajadores murieron por una inundación en una mina similar en Meghalaya.
El acceso a las minas de ratonera es extremadamente complejo, dificultando las labores de rescate. Los mineros trabajan en espacios confinados, utilizando cuerdas y cestas para transportar el carbón. La profundidad y la estructura de estas minas verticales, a menudo con túneles de apenas un metro de ancho, representan un enorme desafío para los equipos de rescate.
La situación subraya la necesidad de una regulación más estricta y la implementación de medidas para garantizar la seguridad de los trabajadores en la industria minera de la India, especialmente en áreas remotas donde prevalecen las prácticas ilegales y peligrosas.