La rutina diaria de miles de pasajeros a punto de iniciar un viaje, un viaje con destino a un sol radiante en Phoenix. Pero esta mañana, la rutina se interrumpió. El vuelo 1727 de United Airlines, con 167 pasajeros y 6 tripulantes a bordo, experimentó un percance inesperado durante su despegue. Un incidente que obligó al avión a retornar a la terminal, interrumpiendo los planes de viaje de cientos de personas.
"El tren de aterrizaje chocó con un coyote", confirmó una portavoz de United a CBS News Chicago. Un hecho insólito que, por un instante, transformó la escena habitual de despegue y aterrizaje en un escenario digno de una película.
Tras el impacto, el avión, un Boeing cuyo modelo no fue especificado por la aerolínea, regresó a la puerta de embarque para una inspección exhaustiva. La prioridad, por supuesto, fue la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
- Evaluación del daño al tren de aterrizaje.
- Inspección de la aeronave para descartar daños estructurales.
- Reacomodación de los pasajeros a otro vuelo.
El incidente, sin duda, generó un retraso considerable en los planes de viaje, pero afortunadamente, no se reportaron heridos entre los pasajeros o la tripulación. Los protocolos de seguridad se activaron de inmediato, asegurando un desenlace sin mayores consecuencias para las personas a bordo.