A las 6:20 AM, una camioneta Dodge Ram, de color aún no especificado por las autoridades, fue detenida por agentes de la Patrulla Fronteriza del Sector Laredo. Este operativo, aparentemente rutinario, derivó en un hallazgo sorprendente.
Dentro de la camioneta, los agentes encontraron a diez personas en situación irregular. La investigación posterior reveló que todos eran migrantes, una mezcla de ciudadanos mexicanos y guatemaltecos que viajaban sin los documentos necesarios para estar en Estados Unidos. "Todos los sujetos se procesaron de acuerdo con su estatus migratorio individual," declaró un portavoz de la Patrulla Fronteriza en un comunicado oficial, sin ofrecer mayores detalles sobre los procesos individuales.
Pero la historia no termina ahí. El análisis más profundo del vehículo arrojó un dato inesperado: la camioneta Dodge Ram había sido robada. Esta información llevó a que el vehículo fuese puesto a disposición del Departamento de Seguridad Pública de Texas, iniciándose una investigación paralela para determinar el origen del robo y las posibles conexiones con el tráfico de personas.
Las autoridades no han ofrecido mayores detalles sobre la identidad de los migrantes, sus posibles rutas de ingreso al país, ni sobre el posible vínculo entre el robo del vehículo y el traslado de estas diez personas. La investigación continúa, y se espera más información en los próximos días.