Agentes del ICE lanzan gas lacrimógeno a casa de ex beneficiario de DACA con un bebé adentro
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El foco de atención se centra en Juan Ramón Hernandez-Limón, de 28 años, un ex beneficiario del programa DACA, traído a Estados Unidos cuando solo tenía seis meses de edad. Su pasado, marcado por una deportación previa y un regreso posterior al país, ahora lo enfrenta a una situación extremadamente compleja.
Según reportes de Univision y NBC, el incidente comenzó con la llegada de agentes del ICE a su hogar. La ausencia de una orden de arresto inicial provocó que Hernández-Limón se refugiara en su casa, donde se encontraban su esposa, su hija de un año y otros dos menores. Lo que siguió fue una operación de seis horas que involucró a agentes locales, estatales y federales, con vehículos de estilo militar.
La esposa de Hernández-Limón, hablando anónimamente con un reportero, describió una escena caótica: "Rompieron las puertas traseras y las ventanas. Intentábamos salir, pero seguían lanzando cosas, y no queríamos arriesgarnos con la bebé". Videos que circulan en línea muestran a los agentes de HSI lanzando objetos contra las ventanas, rompiéndolas, mientras un humo blanco envuelve la casa. Se escucha a los agentes decir en español: "Abran, por favor. Salgan de la casa".
El testimonio del agente del ICE, Michael Dryja, en una audiencia federal el 5 de febrero, añadió otra capa de complejidad a la narrativa. Dryja confirmó que los agentes eran conscientes de la presencia del bebé antes de tomar la decisión de lanzar gas lacrimógeno al interior de la vivienda. Además, declaró que Hernández-Limón no infringió ninguna norma al entrar en su casa tras la interacción inicial.
Según la información disponible, Hernández-Limón fue arrestado en 2021 por posesión ilegal de un arma de fuego y ha sido deportado en dos ocasiones anteriores. Actualmente se encuentra en prisión federal, a la espera de que un tribunal federal revise su caso. De ser declarado culpable por reingreso ilegal, se enfrenta a una pena de entre dos y veinte años de prisión, seguida de una orden de deportación, según el 8 U.S. Code § 1326. La situación destaca la complejidad de las leyes migratorias y las consecuencias que enfrentan las personas que regresan a Estados Unidos tras haber sido deportadas.
El incidente ha generado un debate sobre las tácticas empleadas por el ICE y el impacto en las familias. Los detalles sobre el historial migratorio de Hernández-Limón, su arresto anterior y las circunstancias específicas de la operación, están bajo escrutinio.