Asalto armado en Hyde Park: Estudiantes de Chicago víctimas de robo
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El sábado a las 5:15 am, tres estudiantes de la Universidad de Chicago se convirtieron en víctimas de un asalto a mano armada. Según informes de la institución, cuatro o cinco individuos, armados y descendiendo de una camioneta Alfa Romeo blanca, sin placas, los interceptaron en la cuadra 5800 de South Dorchester Avenue.
La rapidez del ataque fue brutal. Los asaltantes, sin mediar palabra, exigieron las pertenencias de los estudiantes antes de huir velozmente en su vehículo. “Es realmente aterrador,” comentó Ermeen Choudhury, estudiante de la universidad, reflejando el sentimiento de inseguridad que se ha instalado en la comunidad.
Afortunadamente, no se reportaron heridos. Sin embargo, el incidente ha generado una ola de preocupación entre la población estudiantil. Carolyn Montag, otra estudiante, expresó su sorpresa al enterarse del suceso a través de un correo electrónico de la universidad, afirmando: “Supongo que me sorprendí. Sé que a veces habrá guardias de seguridad apostados en esta esquina.” La falta de una presencia policial más constante es una preocupación latente.
La respuesta de la universidad fue inmediata. Eric Health, vicepresidente asociado de seguridad, envió un comunicado instando a la comunidad universitaria a extremar precauciones: “estén alertas y conscientes de sus alrededores en todo momento, no se resistan a un robo a mano armada a menos que sea absolutamente necesario, (y) eviten usar teléfonos celulares u otros dispositivos electrónicos mientras estén en la calle.” El comunicado también recuerda la ubicación de los teléfonos de emergencia y la importancia de reportar cualquier actividad sospechosa.
La investigación está en curso. El Departamento de Policía de la Universidad de Chicago, junto con el Departamento de Policía de Chicago, están trabajando para dar con los responsables. Se insta a cualquier persona con información relevante a comunicarse con las autoridades al 123 desde un teléfono de la universidad o al 773-702-8181 desde otros teléfonos. La tranquilidad del vecindario, por ahora, pende de un hilo.
Algunos estudiantes, como Harrison Stallaert, mostraron apoyo inmediato a las víctimas, asegurándose de que estuvieran bien. Este acto solidario contrasta con la fría violencia del asalto, dejando una sensación ambivalente en el ambiente: miedo, pero también esperanza en la solidaridad comunitaria.