Oficiales acusados de organizar 'peleas de gladiadores' en centro juvenil de Los Ángeles

El epicentro del escándalo: el Centro de Detención Juvenil Los Padrinos. Ahí, según el Fiscal General de California, Rob Bonta, se destapó una red de abuso sistemático. No se trata de un caso aislado, sino de una práctica organizada y tolerada por al menos treinta oficiales del centro.
Entre julio y diciembre de 2023, se organizaron cerca de 70 enfrentamientos entre menores, lo que el Fiscal definió como "peleas de gladiadores". El número de menores afectados asciende a 143. Los oficiales, lejos de intervenir, no solo permitían estas peleas, sino que en algunos casos, las alentaron activamente, tal y como muestran las imágenes del video filtrado en enero de 2024.
El material audiovisual, de una crudeza impactante, muestra a menores siendo brutalmente agredidos mientras los agentes observan impasibles, algunos incluso riendo o felicitando a los agresores. Esta evidencia irrefutable condujo a la acusación formal de los oficiales por abuso infantil, poniendo en peligro a un menor, conspiración y agresión.
Hasta el momento, se han procesado a 22 de los 30 oficiales, mientras que los ocho restantes enfrentarán la justicia el 18 de abril. La gravedad de las lesiones sufridas por los menores aún no se ha revelado públicamente.
El Fiscal Bonta, en un comunicado oficial, sentenció: "Los oficiales del Centro de Detención Juvenil Los Padrinos tienen el deber de garantizar la seguridad y el bienestar de las personas bajo su cuidado. En cambio, los oficiales acusados hoy hicieron exactamente lo contrario: supervisaron ‘peleas de gladiadores’ cuando deberían haber intervenido".
La investigación no solo expone la brutalidad de los actos cometidos, sino también las graves deficiencias del sistema. La Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles ya había declarado una emergencia local en las instalaciones, citando la falta de recursos y personal como factores críticos. Esta situación, según las autoridades, facilitó el desarrollo de esta red de abuso.
A pesar de una orden estatal que exige su cierre, se emitió una proclamación para mantener el centro operativo mientras se busca una solución a la crisis de personal. El caso ha generado un debate nacional sobre la necesidad urgente de reformar el sistema de justicia juvenil en California, garantizando la seguridad y el bienestar de los menores bajo custodia.
El mensaje del Fiscal Bonta es claro: "Que los cargos de hoy sean una advertencia para todos aquellos que abusan de su poder: el Departamento de Justicia de California está observando y los haremos responsables".