Trump elige un Tesla Model S: Sorpresivo apoyo a Musk

En el Pórtico Sur, frente a las cámaras, se presentaron cinco modelos de Tesla. Donald Trump, presidente de Estados Unidos, inspeccionó los vehículos en compañía de Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX, quien acudió acompañado por su hijo X. La escena, inusual por sí misma, se convirtió en el preludio de una decisión que ha generado especulaciones.
"Creo que ha sido tratado muy injustamente," dijo Trump sobre Musk, añadiendo que "no se le puede penalizar por ser un patriota." Este respaldo público del presidente se produce en medio de una fuerte caída en las acciones de Tesla y una considerable reducción en la fortuna de Musk, quien, a pesar de todo, sigue figurando entre los hombres más ricos del mundo según el Bloomberg Billionaires Index. Musk, por su parte, ha invertido más de 200 millones de dólares en la campaña presidencial de Trump y lidera el controversial Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE).
La sorpresa llegó con el anuncio de Trump en Truth Social: su intención de adquirir un Tesla. Esto, a pesar de sus declaraciones previas en contra de los vehículos eléctricos. La justificación, según el expresidente, es una muestra de "confianza y apoyo" a su cercano colaborador. Pero la decisión no está exenta de polémica.
El modelo elegido fue un Tesla Model S rojo. Este vehículo, según las especificaciones, alcanza una velocidad máxima de 322 km/h y ofrece una autonomía de hasta 647 km con una sola carga. Cuenta con características de alta gama como:
Trump, en un mensaje en Truth Social, atribuyó estas reacciones a un supuesto boicot coordinado por "los lunáticos de la izquierda radical", calificando a Tesla como el "bebé" de Musk.