Redada de ICE en Massachusetts deja a niño de 12 años solo en la calle

La concejala Colleen Bradley-MacArthur, quien participaba en la caminata, fue testigo de una escena impactante: agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), vestidos de civil y con rostros cubiertos, realizaron una redada. El foco de atención, sin embargo, no fue solo la detención en sí misma, sino lo que ocurrió después. El arresto de un inmigrante dejó a un niño de 12 años solo, abandonado en la calle.
“Parece más o menos de la edad de mi hijo,” comentó la concejala Bradley-MacArthur en una entrevista con NBC10, visiblemente conmocionada. “Me revuelve el estómago como madre, como ser humano.” Un voluntario del grupo Neighborhood Watch se encargó de llevar al menor a casa, asegurándose de su bienestar.
Pero la situación no terminó ahí. La concejala denunció un presunto intento de intimidación por parte de un agente del ICE. Según su relato, un vehículo del operativo se dirigió hacia ella de forma deliberada mientras grababa el evento. “Se notaba que intentaba intimidarme con el coche,” afirmó, agregando que el agente se negó a identificarse, a pesar de la obligación legal de hacerlo.
El video grabado por la concejala muestra al agente ignorando sus preguntas y ordenándole que se alejara. Bradley-MacArthur insiste en que solo estaba ejerciendo su derecho a observar y documentar un acto público, sin interferir en la operación.
Ante la controversia, el Departamento de Policía de Waltham emitió un comunicado aclarando su postura: el departamento no colabora con el ICE en operativos de inmigración, en concordancia con las políticas de protección comunitaria de Massachusetts. Este hecho se confirma con un segundo incidente días después, donde la concejala contactó directamente a la policía para verificar su no involucramiento.
Sin embargo, el caso de Waltham no es aislado. Una semana antes, en Worcester, otra redada del ICE generó indignación, con arrestos de personas que intentaron intervenir y dudas sobre la colaboración de la policía local. Estos eventos resaltan la necesidad de un diálogo abierto entre la comunidad, los voluntarios y las fuerzas del orden.
La concejala Bradley-MacArthur propone la creación de una mesa de diálogo para establecer protocolos claros de actuación en operativos similares, buscando proteger a la comunidad y salvaguardar los derechos civiles. El incidente en Waltham deja una profunda marca en la comunidad, generando interrogantes sobre la aplicación de la ley y la protección de los más vulnerables.