El pasado miércoles, en plena hora pico, la tranquilidad de la estación se vio interrumpida por un estruendo que congeló a los presentes. Un hombre, de unos 40 años, yacía inerte sobre el asfalto. El pánico se apoderó del lugar, mientras la escena se convertía en un escenario de horror.
La Fiscalía mexiquense, encabezada por el Agente del Ministerio Público, se movilizó con prontitud para iniciar la investigación. Las cámaras de seguridad, testigos presenciales y la meticulosa reconstrucción del lugar de los hechos serían las piezas claves para determinar la causa de la muerte.
Según los primeros indicios, el hombre se habría acercado peligrosamente al borde del andén, con la mirada fija en un punto desconocido. Distraído por un motivo aún por determinar, no habría percibido la inminente llegada del tren, que lo impactó de manera directa, causándole la muerte instantánea.
Las autoridades no descartan ninguna hipótesis, investigando si se trató de un accidente o de un acto intencional.