Todo comenzó con la ausencia de dos laptops y otros equipos electrónicos de un hogar. La esposa, al percatarse de la falta de sus pertenencias, inició una búsqueda que la llevaría a un desenlace sorprendente. Su investigación la condujo hasta un bar local, un lugar frecuentado por su marido.
Ahí, en medio de la música y las conversaciones, encontró a su esposo. No estaba solo; lo acompañaban varias mujeres. El detalle crucial: "él estaba celebrando, gastando dinero que había obtenido empeñando sus propias laptops", según fuentes cercanas al caso. La situación escaló rápidamente. Una discusión, un altercado… detalles que aún se investigan.
La situación se intensificó. Para evitar un enfrentamiento mayor, el hombre decidió huir. Corrió por las calles, perseguido por su esposa. La persecución culminó en la Prolongación de la 4 Oriente, cerca del Puente de la Juventud. En un acto desesperado, saltó desde una altura de aproximadamente seis metros.
El impacto dejó al hombre con una fractura de pierna. La mujer, tras el impacto inicial, reaccionó llamando a los servicios de emergencia. Paramédicos y personal de rescate urbano llegaron al lugar y atendieron al herido, trasladándolo posteriormente a un hospital. La Policía Municipal, por su parte, entrevistó a la mujer y testigos para esclarecer los hechos y descartar cualquier delito de violencia.
El incidente deja varias preguntas en el aire. ¿Cómo afecta la tecnología a las relaciones personales? ¿Qué impulsa a alguien a tomar decisiones tan extremas? Estos son sólo algunos de los interrogantes que surgen a partir de este peculiar suceso atlixquense. El reporte policial, por el momento, se centra en descartar violencia doméstica y en determinar el curso de la investigación para la recuperación de los aparatos electrónicos.