El Diario de SonoraNogales
Más de una docena de migrantes haitianos continúan varados en Nogales, a la espera de poder obtener algún permiso o visa que les permita trabajar en Estados Unidos, pero ya muchos han perdido la esperanza y ahora ruegan por oportunidades laborales en esta frontera.
Uno de ellos es Bourjolly Lucente, quien al igual que sus compatriotas, está desesperado ante la falta de dinero y trabajo, esto después de más de cuatro meses de permanecer en Nogales.
El migrante dijo que se encuentran en una situación desesperante, esto después de la situación con el nuevo gobierno estadounidense, la falta de trabajo legal en México y la presión de volver a Haití con las manos vacías.
“No conocemos a nadie, pero entonces hay muchos amigos que nos está ayudando a nosotros, no siempre nos gustaría que la gente está dando, es importante que uno pudiera encontrar un trabajo, que estén entrando unos pesos, ayudar a las familias de nosotros en Haití, que está esperando a nosotros, que se pueda compartir un par de pesos a ellos”, dijo.
Agregó que los recursos son escasos para ellos, además de que cada día que pasa ven más lejana la meta de conseguir un empleo que ayude a sus familias, que en su mayoría se encuentran en la isla caribeña, por lo que considero imperativo obtener cualquier trabajo aunque éste sea de forma indocumentada e informal.
Lucente indicó que todo esto se ha dificultado por las políticas migratorias y los problemas que han tenido algunos para ingresar al vecino país, por lo que al momento cerca de 16 haitianos permanecen en Nogales en espera de una visa de trabajo mexicana.
Están en una precaria situación, que los ha orillado a tratar de integrarse a una actividad productiva aunque sea de forma informal, pero también esto ha demostrado ser un reto.
“Es importante que uno tuviera que estar trabajando me entiendes, pero como los de migración dice que nos iba a ayudar a nosotros con algunos documentados, pero todavía no salía el trámite, entonces nosotros estamos esperando, están pasando días y meses”, comentó.
“Pero todavía no resuelven nada, mientras tanto, si algún amigo de dios tuviera en el corazón, perfectamente podría darnos algún trabajo a nosotros, algún trabajo temporal, para poder ganar algunos pesos, para poder comer, sin necesidad de pedir para comprar y a los familiares también poder mandar alguna ayuda”, concluyó el migrante.
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