Ambos, con experiencia en la saga Matrix junto a Keanu Reeves, quedaron cautivados por la historia. "Era un proyecto pequeño, pero nos enamoramos de él", confesó Leitch en una entrevista con The Hollywood Reporter. En ese momento, Willis ya estaba en la lista para interpretar al personaje.
Sin embargo, Stahelski y Leitch tenían una idea audaz: dirigir la película ellos mismos. "Le dijimos a Keanu: 'Es un proyecto pequeño para nosotros, pero ¿qué te parece si lo hacemos todo?', recuerda Leitch. "Y él respondió: 'Sí, por favor. Hagámoslo. ¿Cómo lo hacemos realidad?'".
Fue así como el destino puso a Reeves en el camino de John Wick, un personaje que lo catapultó a la fama. La historia de la saga es un ejemplo de cómo una decisión puede cambiar el rumbo de una película, dejando un impacto profundo en la industria cinematográfica.