En una entrevista con la revista Fotogramas, Keanu Reeves explicó que las exigencias físicas y mentales eran bastante fuertes. "Aplaudíamos cuando se acababa una escena. Era todo un chute de adrenalina: las sirenas sonando; al actor que le tocara ese día, rodeado de cables; ruidos de lo más raros; media docena de tipos sujetando los cables... Todo para hacer un giro en el aire de 360 grados como si fuera lo más normal y cuatro cámaras rodándolo. ¡Como para no aplaudir!"
Entre las escenas que más le costaron trabajo realizar, "Un par de veces no pude andar. Hubo un par de secuencias en las que tenía que cargar como 25 kilos de armas y esperar a que los de efectos especiales hicieran su trabajo. Vamos, que tuve que quedarme quieto como unas tres horas y luego no me respondían las piernas", declaró el actor. También mencionó la escena del kung-fu, que fue lo último que rodaron de la película y que requirió meses de entrenamiento.
A pesar de su fama, Keanu Reeves no se considera una persona famosa. "No soy tan famoso, si es a eso a lo que se refiere. Me puedo mover con tranquilidad por Los Ángeles y Nueva York. No soy tan conocido. 'Matrix' fue un éxito, pero es solo una película... y esta industria se mueve muy rápido". Para él, lo único que verdaderamente es importante es hacer un buen trabajo.
La carrera de un actor es la carrera de un parado, y de vez en cuando tienes trabajo. "Como actor, mi única esperanza es hacer un buen trabajo y, con suerte, la gente irá a verlo", concluyó el actor.