Y es que Kim Kardashian, la reina indiscutible del reality show, ha vuelto a sorprender, no con una nueva línea de maquillaje, ni con un controversial romance, sino con algo… diferente. En el 2011 incursionó en la música con "Jam (Turn it up)", un tema electrónico que, sinceramente, pasó desapercibido para muchos. Pero ahora, regresa con un cover de la clásica canción navideña "Santa Baby", originalmente interpretada por Eartha Kitt en 1953.
Esta no es la primera vez que Kim se aventura con "Santa Baby". Algunos fans recordarán su memorable (o infame) interpretación en Keeping Up With the Kardashians, que provocó risas y algunas burlas entre sus hermanas. Sin embargo, esta nueva versión… es otra historia.
El video, compartido este lunes en sus redes sociales, es, cuanto menos, peculiar. Grabado con un filtro VHS que le da un aire vintage de película de terror, el clip nos presenta una fiesta caótica.
- Kim se arrastra por el suelo.
- Hay un hombre disfrazado de Jesús.
- Un electricista aparece de la nada.
- Peleas, ronquidos y un fisiculturista completan el panorama.
Las redes sociales, como era de esperarse, estallaron. Las críticas se centran en la extrañeza del video, generando teorías que van desde la simple mala producción hasta acusaciones de simbolismos satánicos o referencias veladas a las famosas fiestas de Puff Daddy. Lo cierto es que el video, sin duda alguna, ha generado un debate en torno a las intenciones creativas (o la falta de ellas) de la socialité.
Se especula que el video, filmado en una de las legendarias fiestas de Diddy, pretendía ser una sátira irónica, una exploración del exceso y la superficialidad del mundo de la fama. Sea cual sea la intención, el resultado es un enigma visual que, hasta el momento, sigue generando intriga y debate.