Nicky Jam: Concierto en Pepsi Center genera polémica por duración y calidad

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El Pepsi Center de la Ciudad de México vibró el fin de semana pasado con la energía de un concierto multitudinario. Miles de fans se congregaron para disfrutar de una noche inolvidable, ansiosos por escuchar los éxitos de una leyenda del reggaetón

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Yelitza Espinoza el 05/06/2025 06:10 AM.
En Espectáculos y editada el 04/06/2025 09:55 PM.

La expectación era palpable, la atmósfera cargada de emoción antes de que las luces se apagaran.

Pero la presentación de Nicky Jam, quien celebra más de dos décadas en la industria musical, no estuvo exenta de polémica. Tras el show, las redes sociales, especialmente TikTok, se convirtieron en un escenario de opiniones divididas. Las quejas, inicialmente dispersas, pronto se convirtieron en una ola de comentarios que cuestionaban la duración y la calidad del evento.

Algunos asistentes denunciaron que el concierto duró apenas 40 minutos, una cifra que generó indignación entre quienes habían invertido tiempo y dinero en la experiencia. “Qué tristeza, uno trabaja para comprar un ticket y para que salgan con esas cosas”, escribió un usuario. Otros fueron más allá, insinuando un posible consumo de sustancias por parte del artista, aunque ningún video circulante evidencia un comportamiento irregular.

Las críticas se extendieron más allá de la performance del cantante. Hubo quienes señalaron deficiencias en la producción del evento, sumando a la frustración generalizada. “Mejor nadonta que aburrido”, comentó otro asistente, reflejando la decepción de muchos. Se mencionaron también comentarios sobre la falta de empeño del artista, comparando la experiencia en vivo con la comodidad de verlo en YouTube.

La diversidad de opiniones reflejó una experiencia compleja. Algunos usuarios expresaron su tristeza, empleando frases como “Me pone triste saber que se los come el vicio”, mientras que otros se centraron en la pobre calidad del show en general, resumida en un contundente “Nicky Jam, el concierto es malísimo, pero malo, malo”.

Entre las quejas, destaca la percepción generalizada de una falta de esfuerzo en ofrecer un espectáculo a la altura de las expectativas generadas. La brevedad del concierto y las fallas en la producción se entrelazaron para conformar un panorama complejo, dejando un sabor agridulce entre los asistentes al evento.