Corea del Norte lanzó cientos de globos cargados con basura, excrementos y otros desechos, incluyendo baterías, hacia Corea del Sur, en una provocación inusual. El ejército surcoreano movilizó equipos de expertos en explosivos y químicos para retirar los objetos en varios puntos del país.
El líder norcoreano, Kim Jong Un, instó a sus científicos militares a continuar desarrollando capacidades espaciales tras un lanzamiento fallido de satélite, calificando estas habilidades como esenciales para enfrentar las actividades militares de Estados Unidos y Corea del Sur. Kim también amenazó con acciones “abrumadoras” contra Corea del Sur tras unas maniobras con 20 cazas cerca de la frontera.
El Estado Mayor surcoreano informó que Pyongyang lanzó los globos como represalia contra activistas surcoreanos que envían folletos de propaganda contra el gobierno norcoreano. Hasta el miércoles por la tarde, se habían encontrado unos 260 globos, retirados por equipos militares de respuesta rápida.
Los globos transportaban diversos desperdicios, incluyendo estiércol, sin descartar excrementos humanos. Se recomendó a los civiles no tocar los objetos y reportar hallazgos al ejército o la policía. Imágenes mostraban basura en autopistas y carreteras, y en Seúl, se encontró un temporizador para reventar las bolsas en el aire.
No se reportaron daños causados por los globos, aunque episodios similares en 2016 dañaron autos y propiedades. El viceministro norcoreano Kim Kang II declaró que el lanzamiento de basura era una respuesta “proporcional” a los folletos de activistas surcoreanos.
Residentes al norte de Seúl y en la región fronteriza recibieron mensajes de las autoridades pidiendo evitar actividades al aire libre y reportar objetos no identificados. Fotos en redes sociales mostraron bolsas atadas a globos con papel higiénico, tierra y baterías. Yonhap informó que algunos globos llevaban heces, según su color y olor.
El ejército surcoreano condenó el acto como una “clara violación del derecho internacional” y advirtió severamente a Corea del Norte. La tensión entre las dos coreas ha aumentado desde 2022, con intensificación de demostraciones armamentísticas y maniobras militares conjuntas con Estados Unidos y Japón.