Un vehículo, con un niño de nueve años en el asiento trasero, había colisionado contra un automóvil estacionado. La fuerza del impacto fue tal que desplazó el vehículo aparcado hasta el patio delantero de una casa cercana.
El panorama que encontraron los agentes al llegar a la escena era desolador. El vehículo del accidente presentaba daños considerables, y el niño, aún en el asiento trasero, se encontraba gravemente herido. La conductora, en un acto inexplicable, abandonó el vehículo y huyó del lugar a pie. La policía trasladó de inmediato al menor a un hospital local, aunque se desconoce su estado actual.
Lo que convierte este accidente en un caso aún más grave es el hecho de que la conductora huyó, dejando al niño herido y solo en el vehículo. La irresponsabilidad de sus acciones y el riesgo que representó para el bienestar del menor son condenables.
La policía, por su parte, ya ha iniciado las investigaciones para identificar a la conductora y esclarecer los hechos.