El Centro Integralmente Planeado (CIP), anunciado por la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo el 17 de enero de 2025, abarca un área de 3,510 hectáreas y promete una inversión inicial superior a los 800 millones de pesos en 2025. La cifra es impresionante, destinada a la rehabilitación de infraestructura, incluyendo calles, alumbrado y servicios urbanos, con un presupuesto adicional de 240 millones de pesos para estos últimos.
La Secretaría de Marina aportará 300 millones de pesos para la revitalización de la Bahía Histórica. Además, se planea la creación del Maribus, un sistema de transporte marítimo colectivo. Conagua, por su parte, se compromete a una inversión de 1,800 millones de pesos en 2025, como parte de un proyecto mayor de 7,940 millones de pesos para el saneamiento del agua.
Sin embargo, la falta de detalles concretos genera escepticismo. "¿Cómo se asegurará la llegada efectiva de la inversión a las comunidades?", se preguntan muchos. La experiencia pasada, con acusaciones de corrupción en proyectos similares, plantea serias preocupaciones sobre la transparencia y la rendición de cuentas. Se espera que el gobierno presente mecanismos claros para disipar estas dudas.
La conferencia de prensa minimizó las preocupaciones ambientales, mencionando nuevas áreas naturales protegidas, pero omitiendo un análisis profundo sobre el blanqueamiento de corales y la degradación ambiental de la bahía. La falta de un plan específico para mitigar estos daños plantea interrogantes sobre el verdadero compromiso con la sustentabilidad.
Otro punto delicado es la gestión de las playas. La problemática de la privatización y la limitación del acceso público para la población local apenas se mencionó, sin soluciones concretas a corto plazo. Las promesas de rehabilitar accesos parecen insuficientes frente a un problema de larga data.
Finalmente, el CIP se presenta como la solución a todos los problemas de Acapulco, obviando la problemática de la inseguridad. Si bien se reportó una disminución en la incidencia delictiva, la información requiere un análisis más profundo y la comparación con datos independientes para verificar su validez. Presentar el turismo como la solución a problemas como la inseguridad y la pobreza es un enfoque que puede resultar superficial.
El CIP representa una apuesta significativa para Acapulco, pero su éxito dependerá de la transparencia, la ejecución efectiva y la atención a las preocupaciones sociales y ambientales que aquejan a la ciudad.