Tosferina cobra 45 vidas infantiles en México

En un reporte reciente, la Secretaría de Salud reveló datos alarmantes. Se ha confirmado la muerte de 45 bebés a causa de la tosferina, una enfermedad prevenible mediante la vacunación. El detalle más impactante: ninguno de los infantes había recibido la vacuna correspondiente.
De esos 45 casos fatales, 20 eran recién nacidos menores de dos meses, la población más vulnerable ante esta enfermedad. Los restantes 25 bebés tenían entre tres y 11 meses de edad. Esto subraya la urgencia de campañas de vacunación eficientes y accesibles.
La distribución geográfica de estos casos es igualmente preocupante. Si bien se han reportado muertes en al menos 15 entidades del país, Puebla, Chiapas y Jalisco presentan la mayor concentración de letalidad. Esta dispersión geográfica complica la contención del brote y demanda una estrategia nacional coordinada.
Las cifras oficiales son contundentes: se han registrado 2 mil 772 casos sospechosos de tosferina y 749 contagios confirmados mediante pruebas de laboratorio. Estas cifras representan un desafío significativo para el sistema de salud y alertan sobre la necesidad de reforzar las medidas preventivas y de atención.
El análisis de estos datos requiere una investigación a fondo para determinar las causas subyacentes de la baja cobertura vacunal y la alta tasa de mortalidad infantil por tosferina. El impacto de este brote en la salud pública del país es innegable y demanda respuestas inmediatas y efectivas para proteger a la población infantil más vulnerable.