LONDRES, ING
Las favoritas se van temprano y el título lo dirimirán Lisicki y Bartoli.
El torneo se devoró a todas las favoritas tempranamente y el título lo dirimirán Sabine Lisicki y Marion Bartoli, dos jugadoras del montón.
La alemana Lisicki remontó una desventaja de 3-0 en el tercer set para dejar en el camino a Agnieszka Radwanska en las semifinales. En la cuarta ronda había eliminado a Williams, candidata de todos a coronarse por sexta vez en el césped de Wimbledon.
“He sorteado varios desafíos camino a la final, ante jugadoras agresivas, sólida, que se mueven bien”, dijo Lisicki. “Este será otro desafío”.
Será apenas la segunda vez en los 45 años en que se vienen disputando abiertos en que la final de un torneo grande la dirimen dos jugadoras que jamás ganaron un grand slam. Y cuesta decir si alguna luce como favorita.
Para Bartoli esta será su segunda final de Wimbledon, pues disputó la del 2007, en que perdió con Venus Williams. Y no ha perdido un solo set en lo que va del torneo.
Pero su rival la aventaja 3-1 en los enfrentamientos directos entre ellas. Y la venció aquí mismo, en Wimbledon, cuando llegó a las semifinales hace dos años.
“Una final de grand slam la deciden los detalles. Un punto aquí, otro allí marcarán la diferencia”, pronosticó Bartoli, quien tiene 28 años y mucha más experiencia que su rival, de 23. “Tal vez una es un poco más osada, o tiene un mejor día”.