Según fuentes cercanas a la empresa, Meta, la compañía matriz de Facebook e Instagram, ha donado 1 millón de dólares al fondo de inauguración del presidente electo Donald Trump. Esta donación se produce solo unas semanas después de que el CEO de Meta, Mark Zuckerberg, se reuniera privadamente con Trump en Mar-a-Lago. Un portavoz de Meta confirmó la oferta el jueves pasado.
Esta noticia ha generado un gran interés en la comunidad empresarial y política, ya que "Zuckerberg, como otros líderes empresariales, quiere apoyar los planes económicos de Trump", según Stephen Miller, quien ha sido nombrado subjefe de personal para el segundo mandato de Trump. Sin embargo, es importante destacar que Zuckerberg no ha respaldado públicamente a Trump durante la campaña electoral de 2024.
La relación entre Meta y Trump ha sido complicada en el pasado. En 2021, Trump fue expulsado de Facebook después del ataque al Capitolio de Estados Unidos. Sin embargo, la empresa restauró su cuenta en 2023. A pesar de esto, Trump ha continuado atacando a Zuckerberg públicamente durante la campaña electoral.
Es importante destacar que las corporaciones han sido tradicionalmente una gran parte de los donantes a las inauguraciones presidenciales. Sin embargo, en 2009, el entonces presidente electo Barack Obama se negó a aceptar donaciones corporativas. Más tarde, cambió de opinión para su segunda inauguración en 2013.
Las empresas tecnológicas también han participado en la financiación de las inauguraciones presidenciales. Por ejemplo, Google donó 285.000 dólares a la primera inauguración de Trump y a la inauguración de Biden. Microsoft, por otro lado, donó 1 millón de dólares a la segunda inauguración de Obama, pero solo 500.000 dólares a Trump en 2017 y a Biden en 2021.
Los comités de inauguración están obligados a revelar la fuente de su recaudación de fondos, pero no cómo gastan el dinero. Esto ha generado críticas y debates sobre la transparencia y la influencia del dinero en la política.