Trump traslada a migrantes de Guantánamo a centros de Estados Unidos antes de audiencia

El foco de la controversia radica en la decisión de la administración Trump de trasladar a 40 migrantes desde la base naval de Guantánamo, en Cuba, a centros de detención en Luisiana. Esta acción, reportada por The New York Times, ocurrió el martes 11 de marzo, días antes de una audiencia crucial en un tribunal federal de Washington.
La decisión contrasta con la deportación de 177 venezolanos a su país de origen a finales de febrero, desde la misma base. Mientras que estos últimos fueron repatriados, los 40 migrantes trasladados a Luisiana fueron internados en territorio estadounidense. El gobierno justifica el uso de Guantánamo alegando la peligrosidad de algunos migrantes, supuestamente ligados al Tren de Aragua, una organización criminal venezolana. Sin embargo, la falta de pruebas concretas ha generado dudas sobre la veracidad de estas afirmaciones.
Según documentos judiciales, a finales de la semana pasada permanecían en Guantánamo un total de 40 migrantes; 17 en un centro de seguridad media y 23 en el Camp Six, la antigua prisión militar. Un informe del Departamento de Justicia detalla que se les realizaron registros corporales y, en algunos casos, se les sometió a "sillas de inmovilización tras incidentes de autolesión". El coste total de la operación se estima en 16 millones de dólares, un dato que ha generado un amplio debate público.
La operación involucró a 1.000 efectivos de seguridad y contratistas civiles, muchos de ellos desplazados desde bases militares de Estados Unidos, reflejando la magnitud de los recursos utilizados. El viernes, se escucharán los argumentos legales ante el juez federal Carl J. Nichols, en dos demandas presentadas por organizaciones de derechos civiles que cuestionan tanto el acceso a la defensa legal como la legalidad del traslado a Guantánamo.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos argumenta que la medida se sustenta en la Ley de Inmigración y Nacionalidad, pero expertos en derecho migratorio discuten esta interpretación, señalando la falta de consentimiento del país anfitrión para la detención en territorio cubano. Mientras tanto, se espera que el traslado de más migrantes a Guantánamo se suspenda hasta al menos el 17 de marzo, según información judicial.