El mundo del fútbol americano profesional se vio sacudido por la noticia del corte del defensivo Randy Gregory de los Bucaneros de Tampa Bay. La decisión, tomada después de que Gregory no se presentara al campamento de entrenamiento, ha generado una serie de preguntas e interpretaciones.
El entrenador en jefe Todd Bowles, en un comunicado, confirmó el movimiento, declarando que no sabía la razón del ausencia de Gregory. "Le deseo lo mejor. A partir de ahí, seguiremos adelante. No puedes echar de menos lo que nunca tuviste", fueron las palabras del entrenador.
Gregory, de 31 años, había firmado un contrato de un año y 3 millones con los Bucs en la agencia libre. Sin embargo, su relación con el equipo se caracterizó por su falta de participación en los entrenamientos voluntarios de la temporada baja y su ausencia en el minicampamento obligatorio.
Un factor que ha generado controversia en torno a la situación de Gregory es la demanda que presentó contra la NFL y los Broncos en junio. En ella, alegó discriminación por haber sido multado con 532.500 dólares por tomar medicamentos que contenían THC para tratar sus discapacidades.
Gregory afirma que le recetaron dronabinol para la ansiedad social y los trastornos de estrés postraumático, pero se le negaron adaptaciones para el tratamiento de esas condiciones con ese medicamento.
"La NFL ya no suspende a los jugadores que dan positivo por THC, o tetrahidrocannabinol, el químico responsable de la mayoría de los efectos psicológicos de la marihuana, pero sigue siendo una de las sustancias prohibidas de la liga. Los jugadores que dan positivo están sujetos a multas".La demanda argumenta que la resistencia de la liga y del club a proporcionar adaptaciones a Gregory debido a sus discapacidades es discriminatoria según la ley de Colorado.
Gregory, quien fue seleccionado en la segunda ronda del draft de los Vaqueros en 2015, ha tenido una carrera plagada de altibajos. Sus cinco temporadas con Dallas estuvieron marcadas por suspensiones por violar las políticas de drogas de la NFL. En 2022, firmó con Denver, pero se perdió gran parte de la temporada por una lesión en la rodilla. Luego, fue intercambiado a los 49's de San Francisco en octubre de 2023.
Su trayectoria en la NFL se caracteriza por 72 partidos disputados en siete temporadas, 22 capturas, 27 tacleadas para pérdida y 69 golpes al mariscal de campo.
La decisión de los Bucaneros de cortar a Gregory ha generado un debate sobre la manera en que la NFL trata la salud mental de los jugadores y el uso de medicamentos recetados. Se espera que el caso de Gregory tenga repercusiones en la liga y en la forma en que se aborda el uso de sustancias prohibidas.