Javier Báez decidió aplicar la reversa. Con ello, desató el caos y la vergüenza para los Piratas de Pittsburgh.
Ello permitió que Contreras diera vuelta por la tercera base y corriera hacia home. Craig intentó entonces lanzar la pelota al cátcher boricua Michael Pérez, pero Contreras se deslizó para anotar, mientras Báez volvía a cambiar de sentido, para correr a la inicial.