PARÍS, Fra
No cabe duda que Kylian Mbappé será vitoreado cuando salte al césped del Parque de los Príncipes la noche del martes.
Será su último partido de la Liga de Campeones en la capital francesa, con la camiseta del Paris Saint-Germain.
Mbappé se irá del club este verano boreal tras una etapa de siete años, y su ambición es completarla alzando la Copa de Europa en Wembley el 1 de junio.
Pero la tarea inmediata para Mbappé es prender la chispa para una reacción en el partido de vuelta de la semifinal contra el Borussia Dortmund, después de la derrota 1-0 en Alemania la semana pasada.
El astro francés se quedó a deber en el primer encuentro y el PSG apuesta a que su goleador histórico responda con creces para darle la vuelta a la eliminatoria, más cuando no ha podido marcar goles en sus últimos dos partidos contra el Dortmund.
“Nuestro objetivo es, que nuestros mejores jugadores, cuanto más participen, mejor”, declaró el técnico del PSG Luis Enrique el lunes. “Pero claro, si un rival se encierra, hay espacios... Yo no quiero que el delantero toque la pelota en el sitio del central. Yo quiero que el delantero toque la pelota en la fase difícil”.
“Nosotros siempre tenemos un objetivo común: llevar a los delanteros el balón en las mejores condiciones”, añadió el técnico español. “De hecho, como es un equipo, también les decimos a los delanteros que lleven menos balones atrás... Todos somos un equipo y en cada orquesta toca cada uno un instrumento... Hasta los mejores jugadores del mundo deben defender, eso les pasa a los delanteros, y los defensas, aunque sean muy buenos defendiendo, tienen que mejorarlo para llevarlo al ataque”.
Para asistir a Mbappé, el PSG cuenta con amplio poder de fuego, como Ousmane Dembélé, Bradley Barcola, Gonçalo Ramos y Randal Kolo Muani.
“Estamos confiados de que podremos revertir ese marcador y avanzar a la final”, dijo Mbappé.
Luis Enrique tiene más preocupaciones con su sector defensivo, luego que el zaguero Lucas Hernández quedó descartado para el resto de la temporada tras romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda.
La lesión representa un duro golpe para el PGS, que ha encajado 14 goles en el torneo esta temporada pero había encontrado cierta estabilidad en la medular de la defensa con la dupla conformada por el brasileño Marquinhos y el francés Hernández.
Después que Hernánez tuvo que salir por la lesión la semana pasada ante el Dortmund y fue reemplazado por Lucas Beraldo, la falta de experiencia del suplente brasileño fue obvia.
Luis Enrique, sin embargo, no tendría otro remedio que considerar en darle la titularidad o confiar en Milan Skriniar, quien recién salió de lesión y le falta rodaje. Otra opción poner a Danilo Pereira con Marquinhos para añadir fuerza y presencia para contener el juego aéreo, particularmente en las jugadas de pelota quieta del Dortmund.
Defender con sobriedad será crucial otra vez para el PSG al medirse contra un equipo con mucha calidad al frente, uno que presume de tener a 11 diferentes autores de gol en Europa esta temporada.
El ganador se las verá contra el Real Madrid o el Bayern Múnich en la final de Londres. Los viejos rivales empataron 2-2 en la ida disputada en Alemania.
El PSG, que disfrutó de un día de descanso durante el fin de semana tras asegurar el título de la liga francesa, nunca ha ganado el máximo torneo de clubes de Europa. El Dortmund lo hizo en 1997.
Fuente AP