David Price soltó sus primeros lanzamientos de la pretemporada como la gran adquisición de los Medias Rojas de Boston.Johnny Cueto lució sus trenzas naranja que encajaron perfectamente con sus nuevos colores de los Gigantes de San Francisco. Su ex equipo, los campeones Reales de Kansas City, desembarcaron en el desierto y pondrán manos a la obra desde el viernes.El nuevo as de los Diamondbacks Zack Greinke puso en marcha el primer día con su nuevo club poniendo énfasis en los fundamentos de cubrir la primera base.Desde Arizona hasta Florida, el sonido de las pelotas impactando los guantes retumbó el jueves con la primera jornada de entrenamientos para pitchers y receptores, el punto de partida para el nuevo año.Todos los equipos que durante el receso de invierno abrieron la chequera para adquirir pitcheo ahora esperan que esos brazos muestren todos sus kilates.Arizona sorprendió a todos cuando apareció para fichar a Greinke al ofrecerle 206,5 millones de dólares por seis años. Los Diamondbacks anunciaron que el derecho será su abridor en el juego inaugural, una decisión que el manager Chip Hale consideró como la más fácil que podía tomar. Greinke tendrá su primera sesión de bullpen el viernes en Scottsdale.Price aterrizó en Boston con fanfarria similar, luego de firmar por 217 millones y siete años. Jeff Samardzija también empezó a ponerse en sintonía con Buster Posey, su nuevo receptor en San Francisco.Luego de soltar el brazo junto al cerrador Santiago Casilla, se sentó en la Cueva del Scottsdale Stadium para admirar su nueva casa de primavera. Su compatriota dominicano, el ex manager y jardinero de los Gigantes Felipe Alou, se acercó para darle las gracias al pitcher por unirse a la franquicia.¿Se siente nervioso Cueto en estas circunstancias tras consagrarse campeón con los Reales?“Claro que no”, respondió Cueto. “Quizás si fuera novato. Vengo de lanzar en la Serie Mundial. No me pongo nervioso”.Cueto no tardó para mostrar su faceta divertida. Cuando le mencionaron que el as Madison Bumgarner se trajo unos caballos para los entrenamientos, Cueto bromeó: “Debería venderme uno, o que me regale uno”.