Su llegada ha roto todos los tradicionales esquemas de los Spurs para conformar a su equipo.Cuando se trata de la agencia libre, los Spurs de San Antonio no son de hacer olas.Durante los últimos 12 años, los Spurs habían intentado de añadir un agente libre de fuste a su núcleo conformado por Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginóbili, pero sin tener mucho éxito.Disponer de tres estrellas establecidas, cinco campeonatos de la NBA y uno de los mejores entrenadores de la historia como Gregg Popovich debe entusiasmar a cualquiera.Para sorpresa de muchos, incluso los mismos Spurs, San Antonio ató a dos de los agentes libres más codiciados del último mercado: los aleros LaMarcus Aldridge y David West.“Fueron varios los nombres que se nos escaparon en los últimos años”, dijo Duncan en el día de prensa el lunes. “Siempre lo habíamos hecho de forma distinta en la agencia libre y en el draft. Esta es la primera vez que hemos añadido a alguien con el calibre (de Aldridge)”.“Honestamente, no me lo esperaba. Pensaba que iba a irse a otra parte, que no iba a hacerlo (firmar con los Spurs). Me sorprendió”, añadió.Las adquisiciones, junto al retorno de los tres históricos y el ascenso del Kawhi Leonard, tiene a San Antonio entre los favoritos para conquistar el título.Los Spurs cayeron ante los Clippers de Los Ángeles en la primera ronda de los playoffs la pasada temporada, luego de alcanzar la final de la Conferencia del Oeste en tres campañas sucesivas, incluyendo el título de 2014.La eliminación prematura y los refuerzos han revitalizado a los veteranos de los Spurs.Aldridge firmó con San Antonio por cuatro años y 80 millones de dólares, rechazando ofertas de Phoenix, Dallas y los Lakers de Los Angeles.