Los seis equipos de la capital inglesa van a puerta cerrada
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Los seis clubes londinenses de la Liga Premier no podrán contar con aficionados en su estadios nuevamente después que la capital inglesa impuso el nivel más severo de restricciones por coronavirus ante un repunte de contagios.
A raíz de la decisión del gobierno británico, que entra en vigor el miércoles, sólo cuatro clubes de la máxima división del fútbol inglés se encuentran en áreas donde se permite el ingreso a un máximo de 2.000 aficionados en los estadios. Ellos son Everton y Liverpool en la costa oeste y Brighton y Southampton en la costa sur.
La directiva de Manchester ha estado presionando para que las autoridades de la ciudad noroccidental desciendan las restricciones por COVID-19 a su segundo grado que permita el regreso parcial de público a los estadios por primera vez desde marzo.
La presencia de espectadores está prohibida para los clubes Arsenal, Chelsea, Crystal Palace, Fulham, Tottenham y West Ham tan solo dos semanas después de que se autorizara su regreso, dado que Londres ha sido colocado en el tercer nivel de restricciones por COVID-19.
“Me siento un poco decepcionado”, declaró el técnico del Chelsea, Frank Lampard. “Pese a que nos encontramos en nivel dos y de antemano hemos tenido aficionados en un partido, creo que debería haber una igualdad de condiciones en cuestión de aficionados. Si algunos equipos pueden tenerlos y otros no.
Pienso que de antemano hemos visto o sentido desde la cancha lo que el apoyo (de aficionados) puede darnos y lo que significa para el deporte. Creo que debería ser equitativo”.
El secretario de Salud británico, Matt Hancock, dijo que el gobierno debe tomar medidas severas después de haber detectado “aumentos exponenciales muy marcados” en la zona metropolitana de Londres. Agregó que en algunas áreas los contagios se duplican cada siete días.
La medida significa que durante la ronda de duelos de mitad de semana de la Liga Premier, sólo en encuentro del miércoles entre los dos clubes que encabezan la tabla podrá contar con un máximo de 2.000 aficionados en las tribunas, que presenciarán el choque entre el campeón Liverpool y el líder y anfitrión Tottenham.