Tras el fracaso en el Mundial, el Scratch quiere redimirse en la Copa América.Se dice que la Copa América nunca le importó demasiado a Brasil. Las cosas, sin embargo, son distintas esta vez, en que el torneo de Chile asoma como un primer paso camino a la redención después del papelón de la última Copa Mundial.Pentacampeones mundiales, los brasileños han ganado solo ocho veces el título continental, comparado con las 15 de Uruguay y 14 de Argentina. En Brasil, la Copa América no tiene el lustre que en el resto del continente.Pero los brasileños darían cualquier cosa por conquistar esta edición y empezar a borrar el mal sabor dejado por la derrota 7-1 ante Alemania en las semifinales de una Copa Mundial jugada en casa, seguida por otro revés 3-0 frente a Holanda por el tercer puesto.El nuevo técnico de Brasil, Dunga, que llamó a solo ocho de los jugadores que estuvieron en el Mundial, dice que no hay que dramatizar.“Lo que pasó en la Copa Mundial fue algo aislado. Todo el mundo habla de la necesidad de recuperar el respeto, pero el fútbol brasileño sigue siendo admirado en todos lados, la casaca brasileña sigue cotizándose mucho”, afirmó. “La presión por ganar siempre va a existir en Brasil. La selección tienen que seguir siendo competitiva y ganando a cualquier costo”.Dunga arrancó con buen pie luego de reemplazar a Luiz Felipe Scolari, a quien se atribuyó buena parte de la responsabilidad por el desastre de la Copa Mundial y el equipo llega a la Copa América con ocho victorias al hilo, incluidos triunfos ante Francia, Argentina, Colombia y Chile.En esos duelos el equipo marcó 18 goles y le anotaron solo dos. Pero Dunga no quiere generar muchas expectativas.“Todavía no estamos en el nivel en que querríamos estar”, dijo Dunga. “Somos muy exigentes, perfeccionistas, siempre queremos ser los mejores. Para eso hay que seguir mejorando”.