¿Por qué se festeja a los bibliotecarios?

Nogales, Son

Cada 20 de julio se celebra en México el Día del Bibliotecario, profesión que ha tenido que adaptarse a los cambios tecnológicos, pero sin perder esa labor de hacer sentir cómodo al usuario al momento de iniciar o agrandar su experiencia en la lectura.

Por su noble oficio de dar acceso y difusión de la lectura, conocimientos e información, se conmemora en la República Mexicana el Día del Bibliotecario, personas que contribuyen esencialmente a la preservación de la información y buscan compartirla con quienes se acercan a ellos.

“El 20 de julio en México se celebra el Día del Bibliotecario, un bibliotecario es un personaje, es un empleo que tiene mucho que ver con la pasión cultural, con el compromiso con la lectura y la difusión de la lectura, todos quizá tenemos o guardamos en la memoria la imagen, quizá por el cine o porque realmente tuvimos la experiencia de ver un bibliotecario de cierta edad, con anteojos, saco, siempre metido entre los libros y muy entusiasta con los libros y los recomendaba, es un cargo que se mantenido con algunos cambios pero esos serían los requisitos para un bibliotecario”, expuso Ulises Lavenant coordinador de la Biblioteca Municipal Publica.

Como toda profesión que ha sufrido cambios por la innovación de la tecnología, el bibliotecario no ha sido la excepción, esto mismo ha causado que su trabajo no sea esencial para los lectores de inicio, pero si fundamental para quienes ya aman la experiencia de la lectura.

“Son cambios que tienen que ver la tecnología, que afecta no tanto al puesto o a la ocupación, si no, a los mismos usuarios, el bibliotecario ha tenido que modernizarse un poco contemporizar con los muchachos, con los jóvenes y aumentar su bagaje, su dominio del acervo para saber que recomendar”, compartió.

Guiar e ilustrar en base a los gustos o intereses el lector es un trabajo difícil, el poder ser una biblioteca viviente que comparta sus conocimientos es una labor que muy pocos pueden hacer.

“El usuario ya que traspasa el lumbral de la biblioteca ya es una ganancia y el bibliotecario entonces tiene que recibirlo y abrigarlo, hacerle preguntas con sentido para tratar de indagar un poco en los gustos o aficiones del usuario y a partir de ahí saber que recomendarle para que ese incipiente interés se aliente”, finalizó.