Tres anotaciones de CJ Anderson para llevarse el triunfo sobre Bills.C.J. Anderson corrió para tres touchdowns y los Broncos de Denver se sobrepusieron a una inusual actuación inconsistente de Peyton Manning para vencer el domingo 24-17 a los Bills de Buffalo.La racha de Manning de 51 juegos en fila con un pase de touchdown —tres menos que el récord de la NFL de Drew Brees— llegó a su fin en una tarde soleada en Denver, donde la temperatura a la hora de la patada inicial era de unos cómodos 17 grados Celsius (63 Fahrenheit).Pese a tres pérdidas de balón, los Broncos (10-3) ganaron su tercer juego en fila luego de cambiar de una ofensiva basada en los pases a una mucho más enfocada en el ataque terrestre.Manning completó 14 de 20 envíos para 173 yardas y dos intercepciones. Su mejor receptor, Demaryius Thomas, fue limitado a dos recepciones para 11 yardas, y el tight end Julius Thomas (problema en el tobillo) estuvo activo pero no jugó por tercera semana en fila.Buffalo colocó su foja en 7-6.Luck guía a PotrosCLEVELAND, Oh.- Andrew Luck lanzó un pase de touchdown de una yarda a T.Y. Hilton con 32 segundos por jugarse, lo que coronó una remontada de Indianápolis el domingo y los Potros vencieron 25-24 a los Cafés de Cleveland.Cleveland había contenido al quarterback de Indianapolis hasta el minuto final, pero no pudo acabar con él del todo.Antes de que Luck le enviara su pase a Hilton, el running back Daniel Herron de los Potros recorrió dos yardas en cuarta oportunidad para mantener viva la ofensiva. Entonces Luck, quien también sufrió dos intercepciones y pasó el día bajo presión por una enérgica defensiva de los Cafés, le envió a Hilton su segundo pase de touchdown en la siguiente jugada.Los Potros (9-4) iban abajo 21-7 en el tercer cuarto, pero remontaron gracias a Luck, quien completó 24 de 53 pases para 294 yardas.Los Cafés (7-6) tuvieron dos touchdowns anotados por la defensa, pero la ofensiva de Cleveland, encabezada por el quarterback Brian Hoyer —que últimamente se ha visto en dificultades_, no pudo hacer lo suficiente para evitar que sigan desvaneciéndose las aspiraciones del equipo de llegar a los playoffs.