Kevin Durant fue obligado a marcharse del partido del viernes en el tercer periodo, en cumplimiento de los protocolos de salud y seguridad de la NBA.
El primer partido de Durant ante los Raptors desde que se rompió un tendón de Aquiles en la final de la NBA de 2019 fue también frustrante para él y confuso para todos.
Pero en el tercer periodo, se le informó que debía marcharse.