Yo estoy encantado…lurio…feliz de la vida, cada vez que enchueco la jeta porque un juego se va a entradas extras, recuerdo que existe la famosa y controversial regla del corredor en segunda.
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Eso no fue impedimento para que el choque de la noche del martes, entre Diamondbacks y Rockies se alargara cuatro horas y media en trece entradas, luego de arrancar con un retraso de una hora debido a…pues a la nieve que en estos días aún es común en las Rocallosas.
Y el beisbol señores así va ser de aquí para adelante, así que mejor agárrenle tantito cariño a esta regla que para muchos ‘le quita la esencia al beisbol’
Damas y caballeros, he visto beisbol por más de cuatro décadas… la única esencia que le he entendido es hacer más carreras que el otro.
En temas escabrosos, allá por el 2000 Ken Griffey Jr dejó a los Marineros para acordar una ‘escandalosa’ firma de 116 millones de dólares por nueve campañas en un canje que le dio a Seattle a seis jugadores.
Imagínese, Griffey Jr, de la realeza de Cincinnati, su padre ex miembro de la llamada Gran Máquina Roja ganadora de las series mundiales de 1975 y 1976, que perdió una más (1972) y y de varios banderines, era una maravilla.
A partir de ahí, miró descender sus números y aumentar sus lesiones y un jugador que se esperaba batiera la marca de jonrones de por vida de Hank Aaron, Griffey Jr se quedó con 630, muy respetables, pero le alcanzaron para el puesto siete de por vida, treinta menos que Willie Mays y 18 más que Jim Thome.
Contratos a largo plazo
Pero si la suma de billetes de Griffey Jr escandalizó hace más de dos décadas, la de Fernando Tatis Jr es un titupuchal de dinero…y eso que antes estuvieron las firmas por ejemplo de Alex Rodríguez, Albert Pujols y todos esos por los que los equipos de las Mayores han aventado el estadio por la ventana.
Los Astros de Houston le dijeron a Carlos Correa, que ellos no creían para nada en contratos a largo plazo y la noche del lunes deben haber sonreído de ironía al ver al campo corto de los Padres lesionado en el terreno de juego en el, hágame favor, quinto juego luego de pactar 340 millones y catorce temporadas. Ya lo superó Francisco Lindor en los Mets por cierto.
Curt Schilling puede no ser el tipo de más amigos en las Mayores y lo ha dicho, ‘un carro no se puede garantizar por diez años, cómo es que esperan que un jugador esté garantizado por ese período?’
Pero son los equipos los que han causado esto al soltar esos contratos, el jugador está en su total libertad de pedir lo que sea, que se lo suelten es otra cosa. Los aún Indios de Cleveland sabían bien que debían desprenderse de Lindor antes que acabara su contrato para salir con algo en las manos…y lo hicieron.
Es la diferencia de clases en las Mayores, algo que en ligas como la NFL, NHL y la NBA han tratado de evitar con los famosos topes salariales que da oportunidad de competir a equipos de los considerados ‘mercados pequeños’, por varios años y no sólo como en 2015 cuando los Reales de Kansas City se cayeron de la litera y ganaron la serie mundial.
Antes de coger rumbo, respecto a Griffey Jr, los Rojos aun deben pagarle tres millones y medio (penys más, penys menos) todavía hasta 2025. Muchas gracias.